Me encontré con una reflexión espontánea hace poco. Inició como muchas otras, con una pregunta.
-¿Qué haces?
-Estoy leyendo - Me contesto la voz de un niño que se encontraba frente a una pantalla de computador.
Por más inverosímil que parezca este diálogo, ocurrió. Y me trajo a la mente un tema que me parece a sido abordado por el Estado, profesionales de la educación, sociólogos, comunicadores, teóricos del conocimientos entre otros profesionales también valiosos. ¿La educación está desfasada con la tecnología disponible actual?
Bueno, en muchas sociedades se ve muy claro este desfase. No cabe duda que otras ya han superado esta barrera del aprendizaje interactivo y del uso y actualización de tecnologías al ambiente educativo normal (o como se espera que sea normal). Recordando estas sociedades que por múltiples factores se quedaron rezagadas en su actualización, me hago la siguiente pregunta ¿Qué se está haciendo por acercarse si quiera al estándar de lo que exige la sociedad? Con el niño de quien les hablo tuve que lidiar unos días atrás para que se aproxime a leer un cuento que había quedado como tarea de su escuela. Claro que podemos poner como un factor de aversión o desánimo el nombre de "tarea" que se les impone como desagradable o castigo, ya sea por los padres que tienen el rótulo de "travieso/a" o "relajado/a" en su hijo/a. Además se le exige que lea como una labor para el colegio un centro de enseñanza formal donde se tienen que rendir exámenes, portarse bien y ser considerado con los demás por tener una nota buena y aprobar el año. Y es así como el conductismo se introduce en las venas de la educación infantil y luego se acostumbra al público consumidor a esperar resultados de tipo nota buena o nota mala creyendo que las notas nos hacen mejores personas o peores personas. Esto recae luego, en el pensar de los padres en que "mi hijo/a es más inteligente que el/la tuyo/a" y el sufrimiento posterior de los comparados por haber rendido bien y no defraudar a sus progenitores o por haber rendido mal y no poder ser lo que sus padres esperan de él/ella.
Luego viene el problema de la motivación para el estudio, y de las cualidades ambientales para una mejor aprehensión de las lecciones expuestas por el/la educador/a (en muchos casos suelen ser damas), las palabras utilizadas y el interés del educador por el educando. Creo que esos son temas de interés social debido a que en esta educación se basa (mas tarde) el comportamiento social de los adultos, como miembros activos en el desarrollo del Estado.
Las tecnologías actuales se centran en el uso de materiales electrónicos y la portabilidad de instrumentos que aportan a la cultura de lo inmediato y la privacidad no tan privada de la realidad. Hace poco leía una investigación de la dimensión educativa de los videojuegos que, creo aún no está siendo parte de la lucidez educativa de estos tiempos. Esto afectará en un futuro a los niños dado que su ingreso a redes y uso de computadores es más simple y útil para ellos y el control parental a veces llega a ser mínimo o nulo. Es tiempo de ponerse las pilas, o mejor dicho, utilizar las mejores herramientas digitales que tiene el ser humano, sus cogniciones para ejercer un cambio en el modelo educativo que permita a los habitantes del futuro que sepan darle un uso adecuado para que su sociedad se mantenga en un status positivo y no negativo como las estadísticas ahora nos pintan el futuro.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario