![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgPRu0lbkTupd7M4k_5RtA-oF2TKaltjtX8EabP5O61psjdcIAawXkCmT7jXTGHB7CeISHTK9iYdGSaRyJEs2s7lc1L128VosZ3X_Iwhws4V1rpQlz5TJXgCcSGTFNJ9ra99lB3GkLA2gA/s320/green.png)
Es difícil dejar de pensar en ti, a menos que esté jugando en la computadora, hoy habré dejado de pensar en ti unas 5 veces… aunque son relativas porque cuando juego suelo poner música y algunas canciones me recuerdan a ti.
La semana pasada estuve pensando en los temas que podría escribir (en vista de que cuando estoy frente al papel a veces me quedo en blanco), y empecé a citar algunas frases, a manera de título, sobre las siguientes cartas, y encontré muchos tanto así que me olvidé, je je (qué cabeza la mía!, bueno tampoco era para tanto, pues los temas los tomaba del cotidiano y creo que en cuanto siga viviendo seguiré escribiendo lo que pensé escribir)…
La espera que no desespera, ese título puede ser para el día en que estuve en la peluquería y esperé más de media hora escuchando lambada (algo muy singular en una peluquería, creo); o tal vez por qué no me atrevo a llamar, pero eso significaría decir mis razones… ja ja… o excusas; lo peor de ver TV, creo que podría escribir de eso hoy; haciéndolas de violinista, ja ja ja… (Pondría en evidencia algunos secretos) mejor un poco más tarde; calling…, para contarte sobre… (mmm me atreveré a darte esa carta?); mm! Tango un titulo muy interesante: first date, espero que sea pronto J; aunque tal vez podría adelantarme con Valentine’s day; ojala algún día llegue a escribir cosas más profundas como un poco filosóficas (pero para que sean leídas después de muerto (es un “sueño póstumo”(que raro sonó eso))).
Estuve pensando en qué podría darte por tu cumple, aun no tengo muchas claras sobre tus gustos, supongo que debería empezar por lo básico, aunque también me gustaría sorprenderte…
Hoy, es un día como para no escribir y a la vez decir cosas que valgan la pena escribirlas, haber gastado un día entero haciendo nada y comprando ideas, conceptos y pensamientos teóricos que (en algún momento) servirán. Recuerdo cuando las cosas eran más fáciles, despertar temprano (seis o seis y media más o menos) hacer lo que se hace de costumbre después despertar: bostezar desperezándose, coger la almohada más cercana (solía encontrarla en mi espalda) y taparme la cara para ni un solo rayo de luz se filtre en mis ojos, recordar que tienes que ir al colegio, y salir apuradísimo para asearte, tender la cama a medias, y tomar un jugo de papaya o naranja tan apurado que me llega a dar mareos, después cambiarme con el uniforme adecuado al día…
Llego al paradero de puerto, veo las caras de los mototaxistas, todos saltando la vista para que no les diga a donde voy (lugar que ellos ya reconocieron por el uniforme) y empiezan a gritar: Sabiduría!! Sabiduría!!... (deben necesitar mucha) en eso se presentan unas chicas vestidas con su uniforme plomo o gris, whatever, y suben de tres en tres a todas las motos que las llevan lo más rápido posible (no por dar un buen servicio, sino porque su ambición es tanta que necesitan dar varias vueltas el mismo circuito para sacar el dinero necesario para gastarlo el fin de semana que viene en la discoteca o pollada bailable de turno) al colegio que está un poco más allá de “La cruz”, y yo me quedo viendo alrededor esperando una moto libre y meterme sin preguntar.
Estando ya dentro del vehiculo (asu! me pulo para escribir), el broder que conduce grita: La Unión!! Universidad!! Y una pareja de universitarios sube, el broder prende la moto y arranca… no es tan largo el arranque pues sólo llega al puente (el trafico atorado pues ya sea un camión o dos carros se cruzan en el centro del puente y tienen que pasar calculando no chocarse ni rasparse siquiera el espejo retrovisor, mientras tanto atrás una fila de mototaxis con tres chicas de plomo o gris cada una espera que el cruce sea lo más rápido posible para no perder tiempo (o dinero), muy atrás, a la altura del mercado nuestra moto que intenta meterse como si estuviera reptanto entre tanta atracadera, cinco minutos después llega a entrar al puente y otra vez aumenta la velocidad…
Bajo de la moto, estiro la mano (casi de memoria) y dejo caer el dinero sobre la mano del conductor y empiezo a correr porque escucho a lo lejos el timbre de entrada a los salones, llegó antes de que se cierre la puerta de entrada para alumnos (que viene a ser la puerta trasera, la de rejas, la que es para los alumnos, pues la principal es para padres y profesores… (Siempre estuve en desacuerdo) tendrán su razón) entrego mi agenda, y voy corriendo, subo las escaleras, y entro a mi salón, veo a mis compañeros todos con sueño tanto como yo y el profesor inicia con la clase…
Así era cuando las cosas eran más fáciles, aunque también me gusta estar en la universidad, siendo que ahora no bajo en la primera sino en la segunda, corro un poco más, subo unas cuantas escaleras más, y veo a todos con sueño después de haber almorzado, wau! Que algunas cosas nunca cambian. Ja ja…
Extrañándote.
zach.
Lima, lunes 02 de febrero del 2009.
La semana pasada estuve pensando en los temas que podría escribir (en vista de que cuando estoy frente al papel a veces me quedo en blanco), y empecé a citar algunas frases, a manera de título, sobre las siguientes cartas, y encontré muchos tanto así que me olvidé, je je (qué cabeza la mía!, bueno tampoco era para tanto, pues los temas los tomaba del cotidiano y creo que en cuanto siga viviendo seguiré escribiendo lo que pensé escribir)…
La espera que no desespera, ese título puede ser para el día en que estuve en la peluquería y esperé más de media hora escuchando lambada (algo muy singular en una peluquería, creo); o tal vez por qué no me atrevo a llamar, pero eso significaría decir mis razones… ja ja… o excusas; lo peor de ver TV, creo que podría escribir de eso hoy; haciéndolas de violinista, ja ja ja… (Pondría en evidencia algunos secretos) mejor un poco más tarde; calling…, para contarte sobre… (mmm me atreveré a darte esa carta?); mm! Tango un titulo muy interesante: first date, espero que sea pronto J; aunque tal vez podría adelantarme con Valentine’s day; ojala algún día llegue a escribir cosas más profundas como un poco filosóficas (pero para que sean leídas después de muerto (es un “sueño póstumo”(que raro sonó eso))).
Estuve pensando en qué podría darte por tu cumple, aun no tengo muchas claras sobre tus gustos, supongo que debería empezar por lo básico, aunque también me gustaría sorprenderte…
Hoy, es un día como para no escribir y a la vez decir cosas que valgan la pena escribirlas, haber gastado un día entero haciendo nada y comprando ideas, conceptos y pensamientos teóricos que (en algún momento) servirán. Recuerdo cuando las cosas eran más fáciles, despertar temprano (seis o seis y media más o menos) hacer lo que se hace de costumbre después despertar: bostezar desperezándose, coger la almohada más cercana (solía encontrarla en mi espalda) y taparme la cara para ni un solo rayo de luz se filtre en mis ojos, recordar que tienes que ir al colegio, y salir apuradísimo para asearte, tender la cama a medias, y tomar un jugo de papaya o naranja tan apurado que me llega a dar mareos, después cambiarme con el uniforme adecuado al día…
Llego al paradero de puerto, veo las caras de los mototaxistas, todos saltando la vista para que no les diga a donde voy (lugar que ellos ya reconocieron por el uniforme) y empiezan a gritar: Sabiduría!! Sabiduría!!... (deben necesitar mucha) en eso se presentan unas chicas vestidas con su uniforme plomo o gris, whatever, y suben de tres en tres a todas las motos que las llevan lo más rápido posible (no por dar un buen servicio, sino porque su ambición es tanta que necesitan dar varias vueltas el mismo circuito para sacar el dinero necesario para gastarlo el fin de semana que viene en la discoteca o pollada bailable de turno) al colegio que está un poco más allá de “La cruz”, y yo me quedo viendo alrededor esperando una moto libre y meterme sin preguntar.
Estando ya dentro del vehiculo (asu! me pulo para escribir), el broder que conduce grita: La Unión!! Universidad!! Y una pareja de universitarios sube, el broder prende la moto y arranca… no es tan largo el arranque pues sólo llega al puente (el trafico atorado pues ya sea un camión o dos carros se cruzan en el centro del puente y tienen que pasar calculando no chocarse ni rasparse siquiera el espejo retrovisor, mientras tanto atrás una fila de mototaxis con tres chicas de plomo o gris cada una espera que el cruce sea lo más rápido posible para no perder tiempo (o dinero), muy atrás, a la altura del mercado nuestra moto que intenta meterse como si estuviera reptanto entre tanta atracadera, cinco minutos después llega a entrar al puente y otra vez aumenta la velocidad…
Bajo de la moto, estiro la mano (casi de memoria) y dejo caer el dinero sobre la mano del conductor y empiezo a correr porque escucho a lo lejos el timbre de entrada a los salones, llegó antes de que se cierre la puerta de entrada para alumnos (que viene a ser la puerta trasera, la de rejas, la que es para los alumnos, pues la principal es para padres y profesores… (Siempre estuve en desacuerdo) tendrán su razón) entrego mi agenda, y voy corriendo, subo las escaleras, y entro a mi salón, veo a mis compañeros todos con sueño tanto como yo y el profesor inicia con la clase…
Así era cuando las cosas eran más fáciles, aunque también me gusta estar en la universidad, siendo que ahora no bajo en la primera sino en la segunda, corro un poco más, subo unas cuantas escaleras más, y veo a todos con sueño después de haber almorzado, wau! Que algunas cosas nunca cambian. Ja ja…
Extrañándote.
zach.
Lima, lunes 02 de febrero del 2009.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario